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miércoles, 23 de febrero de 2011

Para el té de las five o´clock.



En dulce charla de sobremesa,
mientras devoro fresa tras fresa,
y abajo ronca tu perro Bob,
te haré el retrato de la duquesa
que adora a veces al duque Job.

No es la condesa de Villasana
caricatura, ni la poblana
de enagua roja, que Prieto amó;
no es la criadita de pies nudosos,
ni la que sueña con los gomosos
y con los gallos de Micoló.

Mi duquesita, la que me adora,
no tiene humos de gran señora:
es la griseta de Paul de Kock.
No baila Boston, y desconoce
de las carreras el alto goce
y los placeres del five o'clock.



Como bien dice Manuel Gutiérrez Nájera, no hay nada más placentero que el té de las five o´clock.  En León teníamos dos lugares favoritos; por el Blvd. Campestre (al lado de una tienda de vestidos de novia) y el Blvd. Mariano Escobedo (por León Moderno); en el D.F. nuestro rincón favorito está en la calle Álvaro Obregón en la casa de té Caravanseraî, su carta de tés es tan extensa que tardaríamos años en probarlos todos. Aquí puedes pedir tu preparación favorita de hojas de té y hacerte un exquisito té vespertino. 


El té negro es la base ideal para esta bebida, no tan fuerte como lo toman los turcos, no tan insípido como el té de manzanilla común. Sólo 5 grs. de té son suficientes para dos tazas grandes que tomamos mi esposo y yo por la tarde, para acompañarlo son buenas estas deliciosas galletas de nuez.


GALLETAS DE NUEZ PARA EL TÉ DE LA TARDE.



 1 taza de nuez picada
 1 taza de mantequilla sin sal, suavizada
 2 tazas de azúcar glass
 2 tazas de harina
 2 cucharaditas de vainilla
 1/4 de cucharadita de sal.

Se muelen, las nueces para que estén más finas. En un tazón grande se bate con batidora eléctrica a velocidad media la mantequilla con 1/2 taza de azúcar glass, hasta que esponje, agreguen gradualmente 1 taza de harina, la vainilla y la sal, batan a velocidad baja hasta que se incorpore, agreguen el resto de la harina y las nueces molidas y batan un poco más.
Formen una bola con la masa, envuélvala con plástico y refrigérenla durante una hora o hasta que esté firme. Calienten el horno a 180°C. Formen bolitas de masa de 2.5 cm. de diametro, póngalas en charolas para galletas sin engrasar, separadas 3 cm. entre sí.
Horneen de 12 a 15 minutos o hasta que tengan un color dorado claro,deje reposar las galletas por 2 minutos.
Pongan 1 taza de azúcar glass en un refractario, pasen las galletas calientes al refractario, bañen las galletas con el azúcar deben quedar bien cubiertas. Déjenlas enfriar sobre el azúcar. Antes de servir, ciernan el azúcar glass restante sobre las galletas.

Rinde unas 4 docenas, quedan riquísimas y espero las disfruten.

Prueben tostando las nueces y dorando la harina en una cazuela con teflón a fuego lento.







1 comentario:

  1. De click en click llegué a tu blog y vaya que me encantó! Ya guardé varias recetas en favoritos :) A mí también me encanta la Casa de Té en el D.F. súper tranquila para disfrutar la tarde, de ahí el té que más me gusta es el de Fresa Francesa, aunque al ver la carta quieres probar todos :P

    En fin, un gusto leer tus post! Que tengas buen miércoles!

    Cristi.

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