Chiles xalapeños rellenos.

Recién fuimos a Veracruz y me quedé con las ganas de comer unos chiles rellenos o un poco de zacahuil que venden en Papantla fuera del mercado. Pero, cuando uno tiene un bebé a quien  el calor de casi 40º lo pone medio inquieto, siempre hay que buscar opciones para comer tranquilos y el estar parada taqueando fuera en el calor inclemente de Veracruz no era opción esta vez.

Estos chiles xalapeños (receta originaria de Xalapa, Ver.) los comí la primera vez en una reunión de vecinos, yo puse las salsas y frijoles refritos para una parrillada y otros llevaron estos chiles como botana. Luego en casa de una amiga de mi suegra, los volvieron a servir para acompañar la comida principal. Los he preparado en casa, los sirvo con sopa de arroz a la mexicana y suficientes tortillas. El relleno requiere la imaginación de la cocinera o la obligatoriedad de la despensa, los pueden rellenar de carne deshebrada, de carne molida, de queso o atún.  Estos que les presento van con el relleno con el que los conocí.

CHILES XALAPEÑOS RELLENOS.
150 grs. de falda de res deshebrada finamente.
1/2 plátano macho maduro
2 jitomates saladet
1 cebolla pequeña
1 ajo
20 chiles xalapeños grandes verdes
2 huevos
aceite suficiente para freír
sal y pimienta.


Los chiles llevan un procedimiento un tanto laborioso, se lavan y con un cuchillo delgado  se abren y se les sacan las semillas y venas. Para evitar que piquen mucho se ponen a hervir unos dos minutos en agua con una cuchara grande de azúcar, pasados esos dos minutos, se enjuagan (cuidado con los olores a picante, por eso siempre opino que es mejor las cocinas cerradas que las abiertas). Luego se vuelven a poner a hervir nuevamente en agua con sal otros dos minutos. Una vez transcurrido ese tiempo se regresan a una fuente con agua fría, con la finalidad de que conserven en lo posible su color verde. Se escurren.


La falda de res se cocina en cortes pequeños para que al momento de deshebrarla queden trozos pequeños de carne. Se fríe la cebolla finamente picada, con el ajo, se agrega la carne y el jitomate en trozos pequeños. Al final se le agrega el plátano macho también cortado en trozos pequeños (recordemos que vamos a rellenar un chile relativamente corto), se salpimienta y se deja consumir todos los jugos.


Los chiles se rellenas perfectamente, cuiden de que no escurra nada de ellos porque al momento de freírlos podrán tener contratiempos.  Se separan las claras de las yemas, se baten las primeras a punto de turrón, agreguen las yemas. Pasen los chiles por un poco de harina y luego por el huevo, fríanlos en aceite caliente y escurran en una toalla de papel.  


Listo, pueden servirlos solos o con sopa de arroz.